Archivo de la etiqueta: Pecadores

Dando sin recibir de regreso

“Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto.”

Lucas 6:34 RVR1960

Un préstamo es una cantidad de dinero o cosa equivalente que alguien debe a una persona o entidad y que el acreedor o prestamista tiene derecho de exigir y cobrar. En el ámbito bancario, es un producto financiero que permite a un usuario acceder a una cantidad fija de dinero al comienzo de una operación con la condición de devolver esa suma más intereses pactados en un plazo determinado de tiempo. Es frecuente su uso desde tiempos antiguos y también una manera de incrementar ganancias.

No es lícito para los creyentes estar participando en actividades de este tipo, con interés o usura y mucho menos pedir préstamos. Sin embargo, vemos en este pasaje que Cristo dice: Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. Él hace uso del término préstamo (gr. δανείζω daneizō), con el uso de dar por un tiempo determinado y luego que sea devuelto, que puede tener el contexto de hacerlo por un interés adicional o no. Sin embargo, agrega que si lo damos con el objetivo de recibirlo de regreso, ¿en qué nos diferenciamos de los pecadores? Muchas veces conocemos personas que están pasando por situaciones difíciles y estamos en condiciones de ayudarlos, porque Dios nos ha bendecido. Pero por dignidad y decoro podrían sentirse mal aceptando el dinero regalado. Se nos dice que lo prestemos, pero no porque sepamos que lo recuperaremos, sino a los que lo necesitan.

Muchas personas en nuestro círculo de acción pueden estar necesitando ayuda y no lo expresan abiertamente. Amigos, vecinos, hermanos de la fe. Hagamos la diferencia, y seamos canales de bendición para otros, dando de lo que Dios nos ha dado sin esperar que nos sea devuelto, porque cuando damos desinteresadamente, a Dios estamos dando. ¡El Señor te bendiga!

#DandoAOtros, #DandoSinEsperarPago, #MinutosConDios, #ReflexionesDiarias

He venido a llamar pecadores

“No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.”

Lucas 5:32 RVR1960

Una de las excusas que ponen las personas cuando se les invita a la iglesia es que está llena de pecadores. Alegan que han visto personas allí que conocen de la calle, y que no pueden creer que sean cristianos. Otros creen que los creyentes no pueden equivocarse y que deben ser perfectos. Al tener cualquier tipo de roce o situación con ellos, quieren irse de esa congregación, y se sienten muy ofendidos. Sin embargo, cualquiera de estos escenarios no puede estar más lejos de la realidad.

En el evangelio según Lucas, se nos relata que Jesús de Nazaret responde al ser cuestionado acerca de las personas con las que se reunía: no he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento. El llamado no es a los que son salvos, sino esos salvos a hablar, reunirse, predicar y pasar tiempo con los inconversos, para anunciarles el Evangelio de Salvación. Y precisamente las personas que se encuentran en la iglesia, son aquellas que eran pecadoras, pero que fueron redimidas por Cristo. No son perfectas, no son infalibles, son personas que alcanzaron la salvación y siguen al Mesías tratando de perfeccionarse cada vez más y combaten día a día contra su naturaleza pecadora. Son personas que antes estuvieron en el mundo, se percataron que Dios tenía un propósito con ellos, reconocieron su pecado y se arrepintieron con el objetivo de ser salvos y reconciliarse con Dios.

Jesucristo vino por los pecadores y Dios quiere que esas sean las personas que alcancemos. Aunque discipulemos, pasemos tiempo con los hermanos, y tengamos confraternidad con otras denominaciones, como seguidores del Mesías, nuestros esfuerzos deben estar también encaminados a alcanzar almas. Debemos recordar la intercesión, la evangelización, hablar de Cristo a los que no lo conocen, y hacer todo cuanto esté en nuestras manos por ser herramientas útiles en llevar a los pecadores al arrepentimiento.

#NoHeVenidoPorJustos, #HeVenidoALlamarAPecadores, #MinutosConDios, #ReflexionesDiarias

Mejores o peores que otros

“Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas, eran más pecadores que todos los galileos?”

Lucas 13:2 RVR1960

Cuando a las personas le suceden cosas que no son esperadas y les cuesta la vida, genera una conmoción. Sea producto de enfermedades, violencia o desastres de cualquier índole, ante esta noticia de muerte se trata de hallar una explicación de por qué sucedió así. Si la persona es cristiana, causa más desconcierto, pues es conocido que Dios ha prometido cuidar a Sus hijos, y no se supone que le pase nada a los creyentes, solo a los que están en pecado.

Debemos tener algo en cuenta: Dios prometió protegernos, pero no dijo que nunca moriríamos. Más aún, los apóstoles, las personas más cercanas a Jesús, murieron, casi todos de forma violenta. A morir y presentarse ante el Padre se refería Pablo cuando hablaba de acabar la carrera, y es algo por lo que todos pasaremos a no ser que Cristo llame a la iglesia antes. Tenemos una fecha en la cual iremos ante Dios, y una causa de muerte. En el contexto de esta porción, unas personas se acercan a Jesús y hablan de que unos galileos habían muerto por orden de Pilato y que su sangre se había mezclado con los sacrificios que presentaban. Jesús les dijo: ¿Creen que esos galileos, porque padecieron eso, eran más pecadores que los otros? Es probable que los que hablaron de este hecho querían escuchar la opinión del Hijo de Dios acerca de esas muertes, pero el Mesías utilizó otro enfoque del mismo evento. Que murieran de ese modo no tenía que ver con un castigo, aunque quizás si se relacionara con sus decisiones de vida, pero aún si la causa era por eventos naturales, lo importante no era el por qué ni cómo había sucedido, sino si estamos preparados nosotros, como dice posteriormente: si no se arrepienten, todos perecerán igualmente.

No porque alguna persona o cristiano muera es por ira divina, o porque era más o menos pecador. Ya está dando cuentas ante el Juez del universo, pero ¿cuándo será el momento de nosotros morir? Todos somos pecadores, y debemos tener cuidado de estar a cuentas con Dios. Las personas que han partido antes no son mejores ni peores que nosotros. Cada día que tenemos es un nuevo regalo de Dios. Aprovechemos para reconciliarnos con Él, arrepentirnos, servirle, agradarle y adorarle, porque por gracia tenemos 24 horas más de vida.

#MasPecadoresQueOtros, #SomosMejoresOPeores, #MinutosConDios, #ReflexionesDiarias